Viernes dieciséis, partimos a bordo de la Gianella III rumbo a los malecones de Berisso, en busca de bogas y dorados, teniendo una respuesta bastante nula de parte de los dorados, los cuales durante la tarde los encontramos cazando dentro de los canales, pero con una buena pesca de bogas, las cuales no teníamos presencia de ellas desde hace ya casi tres temporadas. Durante la tarde el viento empezó a soplar cada vez mas y decidimos seguir nuestra pesca en los canales, haciendo un rato de troling y teniendo también una optima respuesta de parte de los dorados.

Los elementos utilizados: podemos usar una caña liviana, de 8 a 15 libras, de acción media, de un largo a gusto del pescador. He probado últimamente una cañas de 2,40 metros que hace la pesca muy sensible y agradable. El reel pequeño del tipo sapito o frontal, cargado con multifilamento de 20 mm, o nylon del 0.40 nos ponen en el juego.
Como todos sabemos, los dientes del dorado nos exigen un Terminal de cable de acero de unos 25 centímetros, de 20 libras para el equipo descripto liviano.

NOTA:  Es muy importante reflexionar sobre el destino de los doradillos pescados. La devolución de las capturas tiene que ocupar un lugar preponderante en nuestro plan de pesca porque esta maravilla que hoy estamos disfrutando debe perpetuarse.

ALGUNOS SEÑUELOS UTILES EN EL MERCADO.