El pasado 07 de Octubre mi hermano y yo enfilamos para Berisso atraídos por la reputación de Héctor y su lugar mágico en el Río de la Plata, donde se prometían los últimos matungos de la temporada. Salimos de la marina a eso de las 9 y en poco menos de una hora llegamos al lugar en donde según nuestro guía íbamos a sacar unos pejerreyes de gran tamaño. Cuando llegamos el río estaba muy planchado y sin una gota de viento. Héctor prometía “apenas se empiece a mover un poco, ahí vamos a empezar a sacar”. Pero el tiempo pasaba y nada ... A eso de las 11 y media yo ya estaba perdiendo las esperanzas, pero en eso Héctor me alerta de un borbollón en la boya de adelante y unos segundos mas tarde ya había clavado el primero de lo que iba a ser una jornada para no olvidar.  Tal cual el había anunciado, con las primeras olas entraron a venir los piques. Un rato después del mediodía clave el pejerrey más grande de mi vida, con 50 cms y arriba del kilo.  Habiendo pescado desde chico en distintas lagunas de Buenos Aires, nunca me imagine que en el Río de la Plata pudieran salir estos matungos en Setiembre! Lamento que haya que esperar hasta el año que viene para repetir esta experiencia, pero en Diciembre estaremos firmes buscando las bogas – (esta vez con la botella de gancia en mano...)

Un abrazo,